
La intervención en la Notaría Juan de Dios responde a la necesidad de optimizar el espacio existente, aumentando el número de despachos sin sacrificar la privacidad ni la sensación de amplitud. El diseño integra soluciones arquitectónicas modernas y funcionales, logrando un entorno profesional y acogedor que refleja la identidad y la exigencia del servicio notarial.




Para maximizar la eficiencia del espacio, se emplearon carpinterías de vidrio de suelo a techo que permiten dividir el área en cinco despachos y una sala de reuniones. Este enfoque asegura la privacidad necesaria para cada oficina, manteniendo al mismo tiempo la luminosidad natural y una sensación de apertura en todo el local. Complementando estas áreas privadas, el diseño incluye una recepción con sala de espera, diseñada para ofrecer una experiencia cómoda y profesional a los visitantes.
El interiorismo respeta y realza la arquitectura original del edificio, dejando a la vista elementos estructurales como vigas y pilares de madera. Estos detalles se contrastan elegantemente con carpinterías metálicas negras y acabados neutros, creando un equilibrio entre lo clásico y lo contemporáneo. La combinación de estos materiales y tonalidades no solo optimiza el diseño, sino que también genera un espacio funcional, luminoso y en línea con los valores que caracterizan a la notaría.


